sábado, 15 de noviembre de 2008

Historia de la gaita gallega ....







No se conoce con claridad el origen de la gaita, el conocimiento que tenemos de su aparición es anterior al cristianismo. También se cree que, posiblemente, tuvo su origen en un ambiente pastoril, al añadir a una flauta o caramillo un odre de piel de cabrito, cordero u otro animal. La definición del vocablo “gaita”, viene del gótico gaits, que significa cabra, ya que de la piel de este animal se realiza el fuelle de dicho instrumento (aunque el término aún no está muy demostrado).En el Libro de la Regla Colorada, que se encuentra en la catedral de Oviedo y data del siglo XVI , aparece una miniatura con un conejo tocando la gaita. También, en la sillería gótica del coro de dicha catedral (siglo XV) están representados otros animales gaiteros, como caballos o jabalís. En Galicia la gaita se empleaba, primero para festividades y celebraciones paganas y posteriormente, con la llegada de cristianismo, la iglesia asimiló los elementos musicales de la cultura autóctona y los introdujo en la liturgia, como acompañamiento en misas, procesiones e incluso entierros.


Ya a partir del siglo XVI hay gaiteros profesionales. Finalizado el siglo XIX, la gaita adquiere un gran auge. Surgen los gaiteros más famosos. La gaita gallega no ha sufrido fuertes transformaciones desde la Edad Media, se ha adaptado, si, en mayor o menor medida, pero reitero, no ha tenido fuertes transformaciones si la comparamos con la gaita de Escocia, que empezó a usarse en ese país en el siglo XV y que en el siglo XVIII tenía ya tres roncones, modelo que hay predomina y que fue adoptado en otros países, como en Bretaña, desplazando a las gaitas de estos lugares. La gaita de Galicia sigue teniendo esa encantadora reminiscencia medieval, pero para los tiempos que corren, nosotros necesitamos un instrumento competitivo para cierto tipo de presentaciones y una puesta en escena que impacte en el público, tal como lo hacen las bandas organizadas, quitándole ese sabor campesino, que solo sirve como una colorida estampa, pero nada más.Otros elementos que son susceptibles de cambio son los denominados "trajes tradicionales" con los que tocan los gaiteros y que salvo excepciones, son grotescos y carecen de atractivo. Según los entendidos en el tema, el verdadero traje gallego se ha perdido, el que se usa no es muy anterior al siglo XVIII. En realidad, el llamado "traje galaico" encaja mejor en el campo de la arqueología que en el estudio de la cultura popular, habida cuenta que se trata de algo que ha desaparecido de nuestra realidad para quedarse solo en el recuerdo de algún anciano o en la evocación de un literato. Por otra parte, solo hasta cierto punto le corresponde tal calificativo, ya que se trata de un traje empleado durante un tiempo determinado, más aún, bastante reciente. A esto le corresponde el nombre de "traje gallego", del que no queda más sobrevivencia que las abundantes, toscas y teatrales imitaciones que de él se hacen. En el presente siglo la gaita perdió paulatinamente su importancia y sólo se mantuvo gracias a la afición y al vocación de unos cuantos gaiteros. Entre ellos podemos citar a José Remis Ovalle, que obtuvo el título del Gaitero Mayor de España (Titulo que concedía el Rey de España al mejor gaitero del país en su época) o a José Antonio García Suárez, el Gaitero Veriña. Contra lo creído por mucho tiempo los gaiteros en Galicia no eran pocos a lo largo del siglo XX, sino que había pocos gaiteros de renombre, se contabiliza de uno a dos gaiteros por pueblo. A medida que pasa el tiempo, al igual que cualquier maquina o instrumento cotidiano mejoraron sus prestaciones, la gaita tambien lo hace, mejorando asi los materiales de su construcción, como la nueva incorporación de los fuelles de gore-tex, evitando así las condensaciones producidas por el bao del aliento en los fuelles de goma y por consiguiente una mayor durabilidad de los elementos importantes como son las palletas y los pallones. Contrariamente a lo que piensan muchos, la gaita no es un invento de Los Celtas, aunque sean estos los mejores ejecutantes y los que más la difundieron en el mundo. El origen de la gaita no ha podido ser establecido hasta el día de hoy por investigador alguno. Se ha sostenido que la gaita era ya conocida en Galicia seis siglos antes de la era cristiana, lo cual coincidiría con la instalación en España de la tribus célticas de los sefes, lugones y vetones. Otros señalan que la gaita de Galicia y Asturias fue introducida en el noroeste de la península Ibérica por los suevos, que reinaron en esta parte de España desde el siglo V al VII, así como el nombre procedería del alto alemán, lengua que hablaban los suevos; y en cuanto al origen más remoto de la gaita en España habría que atribuirlo a celtas, fenicios, griegos y romanos, puesto que todos estos pueblos que invadieron el suelo hispano conocían la gaita de la antigua Mesopotamia, antes de la era cristiana.Como se puede deducir, no hay mucho en concreto sobre el origen de este instrumento, aunque es bueno que sigan no sólo las investigaciones sino también las discusiones. Lo cierto es que parece evidente que Galicia fue en la baja Edad Media el centro gaiteril más importante de Europa, debido principalmente a la peregrinaciones a Santiago de Compostela. Estas peregrinaciones durante los siglos XII al XIV se encargaron de difundir la gaita por toda Europa. La llevaban los peregrinos de regreso a sus países, la usaban los monjes benedictinos en sus pequeñas iglesias rurales en lugar del órgano y la difundieron los propios gaiteros gallegos que salían al extranjero a probar fortuna.Tradicionalmente la gaita en Galicia ha sido usada en tres diferentes tonalidades: Re, Do y Si bemol, pero en la actualidad se la fabrica en otras tonalidades como así también se la construye con barquín o fuelle, que se acciona con el brazo. A esta se la llama "gaita de soplo mecánico". La "grillera" está en una tonalidad cercana al Re natural, su sonido es duro y chillón; fue quizás la más primitiva y generalizada en Galicia. La "redonda", es de mayor tamaño que la grillera, y suena en un tono más cercano al do.La "tumbal", es la mayor de las tres, está en una tonalidad grave cercana al Si bemol. Tradicionalmente esta gaita tiene dos roncones y su sonido es solemne.Es habitual ver gaitas con un solo roncón, pero la gaita gallega tiene tres; parece ser que no todos los gaiteros querían usarlos porque les resultaba engorroso lograr la afinación, y por lo tanto, sencillamente los eliminaban en una actitud más cómoda que práctica, con lo cual el instrumento no solo perdía dos voces más, sino presencia. Algunas personas han señalado que el o los roncones tenores es o son un aditamento moderno, es bueno recordar que en las ilustraciones de Las Cantigas de Alfonso X El Sabio, concretamente la miniatura que encabeza la cantiga 350, se puede ver a un ejecutante con una gaita de dos roncones, con lo cual toda discusión se terminó.

Ya a partir del siglo XVI hay gaiteros profesionales. Finalizado el siglo XIX, la gaita adquiere un gran auge. Surgen los gaiteros más famosos. La gaita gallega no ha sufrido fuertes transformaciones desde la Edad Media, se ha adaptado, si, en mayor o menor medida, pero reitero, no ha tenido fuertes transformaciones si la comparamos con la gaita de Escocia, que empezó a usarse en ese país en el siglo XV y que en el siglo XVIII tenía ya tres roncones, modelo que hay predomina y que fue adoptado en otros países, como en Bretaña, desplazando a las gaitas de estos lugares. La gaita de Galicia sigue teniendo esa encantadora reminiscencia medieval, pero para los tiempos que corren, nosotros necesitamos un instrumento competitivo para cierto tipo de presentaciones y una puesta en escena que impacte en el público, tal como lo hacen las bandas organizadas, quitándole ese sabor campesino, que solo sirve como una colorida estampa, pero nada más.Otros elementos que son susceptibles de cambio son los denominados "trajes tradicionales" con los que tocan los gaiteros y que salvo excepciones, son grotescos y carecen de atractivo. Según los entendidos en el tema, el verdadero traje gallego se ha perdido, el que se usa no es muy anterior al siglo XVIII. En realidad, el llamado "traje galaico" encaja mejor en el campo de la arqueología que en el estudio de la cultura popular, habida cuenta que se trata de algo que ha desaparecido de nuestra realidad para quedarse solo en el recuerdo de algún anciano o en la evocación de un literato. Por otra parte, solo hasta cierto punto le corresponde tal calificativo, ya que se trata de un traje empleado durante un tiempo determinado, más aún, bastante reciente. A esto le corresponde el nombre de "traje gallego", del que no queda más sobrevivencia que las abundantes, toscas y teatrales imitaciones que de él se hacen. En el presente siglo la gaita perdió paulatinamente su importancia y sólo se mantuvo gracias a la afición y al vocación de unos cuantos gaiteros. Entre ellos podemos citar a José Remis Ovalle, que obtuvo el título del Gaitero Mayor de España (Titulo que concedía el Rey de España al mejor gaitero del país en su época) o a José Antonio García Suárez, el Gaitero Veriña. Contra lo creído por mucho tiempo los gaiteros en Galicia no eran pocos a lo largo del siglo XX, sino que había pocos gaiteros de renombre, se contabiliza de uno a dos gaiteros por pueblo. A medida que pasa el tiempo, al igual que cualquier maquina o instrumento cotidiano mejoraron sus prestaciones, la gaita tambien lo hace, mejorando asi los materiales de su construcción, como la nueva incorporación de los fuelles de gore-tex, evitando así las condensaciones producidas por el bao del aliento en los fuelles de goma y por consiguiente una mayor durabilidad de los elementos importantes como son las palletas y los pallones. Contrariamente a lo que piensan muchos, la gaita no es un invento de Los Celtas, aunque sean estos los mejores ejecutantes y los que más la difundieron en el mundo. El origen de la gaita no ha podido ser establecido hasta el día de hoy por investigador alguno. Se ha sostenido que la gaita era ya conocida en Galicia seis siglos antes de la era cristiana, lo cual coincidiría con la instalación en España de la tribus célticas de los sefes, lugones y vetones. Otros señalan que la gaita de Galicia y Asturias fue introducida en el noroeste de la península Ibérica por los suevos, que reinaron en esta parte de España desde el siglo V al VII, así como el nombre procedería del alto alemán, lengua que hablaban los suevos; y en cuanto al origen más remoto de la gaita en España habría que atribuirlo a celtas, fenicios, griegos y romanos, puesto que todos estos pueblos que invadieron el suelo hispano conocían la gaita de la antigua Mesopotamia, antes de la era cristiana.Como se puede deducir, no hay mucho en concreto sobre el origen de este instrumento, aunque es bueno que sigan no sólo las investigaciones sino también las discusiones. Lo cierto es que parece evidente que Galicia fue en la baja Edad Media el centro gaiteril más importante de Europa, debido principalmente a la peregrinaciones a Santiago de Compostela. Estas peregrinaciones durante los siglos XII al XIV se encargaron de difundir la gaita por toda Europa. La llevaban los peregrinos de regreso a sus países, la usaban los monjes benedictinos en sus pequeñas iglesias rurales en lugar del órgano y la difundieron los propios gaiteros gallegos que salían al extranjero a probar fortuna.Tradicionalmente la gaita en Galicia ha sido usada en tres diferentes tonalidades: Re, Do y Si bemol, pero en la actualidad se la fabrica en otras tonalidades como así también se la construye con barquín o fuelle, que se acciona con el brazo. A esta se la llama "gaita de soplo mecánico". La "grillera" está en una tonalidad cercana al Re natural, su sonido es duro y chillón; fue quizás la más primitiva y generalizada en Galicia. La "redonda", es de mayor tamaño que la grillera, y suena en un tono más cercano al do.La "tumbal", es la mayor de las tres, está en una tonalidad grave cercana al Si bemol. Tradicionalmente esta gaita tiene dos roncones y su sonido es solemne.Es habitual ver gaitas con un solo roncón, pero la gaita gallega tiene tres; parece ser que no todos los gaiteros querían usarlos porque les resultaba engorroso lograr la afinación, y por lo tanto, sencillamente los eliminaban en una actitud más cómoda que práctica, con lo cual el instrumento no solo perdía dos voces más, sino presencia. Algunas personas han señalado que el o los roncones tenores es o son un aditamento moderno, es bueno recordar que en las ilustraciones de Las Cantigas de Alfonso X El Sabio, concretamente la miniatura que encabeza la cantiga 350, se puede ver a un ejecutante con una gaita de dos roncones, con lo cual toda discusión se terminó. Según el profesor de lenguas románticas, Juan Corominas, la gaita española de Galicia y Asturias habría sido introducida en el Noroeste de la Península Ibérica por los suevos que reinaron en esta parte de España del siglo V al siglo VII; así como el nombre que procedería del bajo alemán que hablaban los suevos. En cuanto a un origen mas remoto de la gaita en España, habría que atribuirlo a los celtas, fenicios, griegos y romanos, puesto que todos estos pueblos invasores de España conocían la gaita traída de la antigua Mesopotamia ya antes de la Era Cristiana. El musicólogo y fabricante de gaitas gallego, Faustino Santalices, afirma en uno de sus escritos que la gaita era ya conocida en Galicia seis siglos antes de Cristo. En todo caso, lo que si parece evidente es que Galicia fue en la Baja Edad Media el centro gaiteril mas importante de Europa, debido, principalmente, a las incesantes y masivas peregrinaciones a Santiago por gentes de todo el mundo cristiano de aquellos tiempos.Durante las peregrinaciones a Santiago (Siglos XIII al XV), la gaita gallega se difundió por toda Europa. La llevaban los peregrinos de regreso a sus países; los benedictinos que la usaban en lugar del órgano en sus pequeñas iglesias rurales; los gaiteros gallegos que salían al extranjero a probar suerte y, mas tarde, soldados españoles de los tercios de España y Flandes. Las conchas -vieiras- del mar de Galicia, el azabache procedente de Asturias y las gaitas fabricadas por artesanos en los pueblos galaicos, eran los tres recuerdos mas apreciados de los peregrinos que volvían de Santiago. Y después fueron probablemente los judíos españoles procedentes del Norte y Noroeste de España, los que llevaron la gaita española a los países de la Europa Oriental y los Balcanes.La mas antigua representación plástica de la gaita con roncón ---probablemente de toda Europa--- es la que aparece e una miniatura del libro de las Cantigas de Santa María, del rey de Castilla Alfonso X el Sabio, de mediados del siglo XIII; y no puede caber duda de que las gaitas que aparecen en aquellas miniaturas eran del tipo usado en Galicia en aquella época. Durante los siglos de la Reconquista la gaita era de uso corriente en la parte del Norte de España dominada por los cristianos.
V. Cobas Pazos, en su obra -La Gaita Gallega-, divide la tonalidad de estas gaitas en tres clases: Tumbal, afinada en Si bemol; normal (redonda), afinada en Do natural; y Grillera, afinada en Re natural. La llamada -Normal- o -Redonda-, es la mas usada en toda Galicia. Esta gaita esta afinada --siempre según V. Cobas Pazos-- en Do natural, y es de dimensiones proporcionalmente mas reducidas que las de la Tumbal que esta afinada en Si bemol. El ronco suena dos octavos mas bajo que la tónica inferior del puntero; mientras que el ronquillo suena la 5ª de la escala del puntero. Según el mismo autor, el ronquillo ---en las gaitas con esta tercera voz--- desempeña la función de pedal continuo sobre la 5ª de la segunda octava del roncón; es decir, que el sonido del ronquillo es como un intermedio entre el bajo del ronco y el tripe del puntero. Este tipo de gaita es el menos usado en Galicia y solo queda en algunas partes de las provincias de Lugo y la Coruña.En cuanto a la tonalidad de la gaita gallega, Francisco Fernández del Riego, dice que: -las gaitas gallegas suelen dividirse en tres clases fundamentales: -Grileira-, -Redonda- y -Tumbal-. La gaita Grileira emite un sonido duro, chillón en tono de -Re-. Dícese que, posiblemente sea la mas primitiva, y es, desde luego, la mas generalizada. La gaita redonda, suena en tono de -Do-. La gaita Tumbal es de un tamaño un poco mayor. Su característica radica en estar en -Si bemol-. Esta tonalidad se halla impregnada de un deje de tristeza; mas es, a la vez, solemne, llena, sonora... Se toca, en general, con tambor solo; otras veces, se le añade el bombo. No falta, sin embargo, quien la toque a dúo con otra, con clarinete, requinto y flauta.- Sobre las expresadas tonalidades de la gaita gallega, coinciden también con el Sr. Cobas Pazos, el musicólogo Maestro Santiago, autor de un método para aprender a tocar la gaita del país, y el Sr. Fernández de Riego, autor de un libro sobre bailes y danzas populares de Galicia.Parece evidente que la voz de triple (aguda) del puntero se siente mas respaldada y canta con mas sosiego y dulzura cuando topa a su lado la compañía de mas de un roncón; pero cuantas mas voces cantantes, mas riesgo de desafinación y mas molestias para el gaitero. Por esta razón en Galicia no prospera el uso de la gaita con mas de un roncón, a pesar de ser esta conocida desde muy antiguo. Por otra parte, el carácter propio del folklore musical gallego se acomoda bien con la gaita corriente de un solo roncón, que generalmente se acompaña de una organografía muy rica y expresiva, como un numeroso y selecto cortejo en torno a la reina que es la gaita. La organografía popular gallega en torno a la gaita, se compone de bombo, tambores, panderos de sonajas y sordo (adufe) conchas marinas, triangulo y castañuelas que, junto con el coro de voces mixtas, constituye un conjunto de riquísima polifonía audiovisual. Es un legado lírico de los mundos celtogermanicos, grecolatino y arábigo-oriental, que en el transcurso de los siglos fueron dejando su impronta en el milenario pueblo gallego. Estas asambleas líricas populares nos recuerdan al glorioso pueblo griego de la antigüedad que hizo del arte, la música, el canto y la danza, uno de los mas bellos objetivos de su vida social. La gaita en Galicia desempeña la triple función de instrumento de música popular, religiosa y militar. Si en el ámbito de la lírica Galicia es tan rica en su organografía popular, no lo es menos en la gama de sus cantos, bailes y danzas tradicionales. Las muiñeiras, las carballesas, las ribeiranas, los alalás, las foliadas o cantos de pandeiro, jotas y fandangos y las alboradas. Según Felipe Pedrell la muiñeira, el baile coreado mas indiscutiblemente unido a la gaita gallega, tiene su origen en el canto coral de los griegos, quienes tuvieron un comercio muy activo con Galicia ya desde antes de la era cristiana

1 comentario:

arlindo dijo...

Por don Francisco Vázquez Saco, sabemos que o 4 de xullo de 1611 , o Concello de Sárria, outorgaba un contrato con Xoán Ribela, gaiteiro de Santa María de Merza ( Pontevedra), polo que se obrigaba ocncorrer " co seu instrumento de gaita, nas festas de Corpus, San Xoán e as Pascuas de todo o ano"... e " regocixalas, así as danzas que se fixesen como as mascaradas e outros regocixos". E o Concello manifesta a necesidade de que houbese na vila o oficio de gaiteiro para as festas de Corpus " e outras segundo que de moitos anos a esta parte estaban en posesión e costume de telo e salarialo".